En la pasada campaña, España produjo 475.051 toneladas de tomate y se espera que durante estos dos meses se conserven 1,2 millones de toneladas de esta hortaliza. Los campos de Andalucía, Almería y Extremadura son tierra de frutos rojos que colorean muchos platos y son imprescindibles en la dieta mediterránea. Sin embargo, la secuela y las escenas corren peligro en su producción. «El cambio climático representa un gran viaje para las empresas alimentarias, pero también una oportunidad para fortalecer nuestro compromiso con la sostenibilidad», afirmó David Shaw, director global de ESG de Heinz. Muchos de los tomates que utiliza en sus productos se venden en la casa española, concretamente, desde el extremo. “Nos esforzamos por mejorar las técnicas de cultivo y la calidad del trabajo para mantener las condiciones óptimas”, añade.
-¿Qué impacto tiene el cambio climático en su negocio?
-El cambio climático puede tener un impacto significativo en nuestro negocio y podemos ver señales tempranas de este impacto en varios frentes. En primer lugar, la variabilidad climática afecta directamente a nuestros cultivares y, por tanto, a la disponibilidad y calidad de ingredientes clave para nuestros productos. Las secuelas, inundaciones y cambios de estación pueden modificar la producción y disponibilidad de estos ingredientes. Además, la demanda de los consumidores y la conciencia sobre el cambio climático están impulsando la necesidad de una gestión más sostenible en nuestro negocio. Estamos trabajando activamente para reducir nuestras emisiones de gases invernales, gestionar los recursos naturales de manera eficiente y utilizar métodos agrícolas sostenibles como parte de nuestra estrategia de sostenibilidad. El cambio climático representa un gran reto para las empresas alimentarias, pero también una oportunidad para reforzar nuestro compromiso con la sostenibilidad, siendo responsables con el medio ambiente y las necesidades de nuestros consumidores.
-¿Cuál es el camino recorrido por la empresa en términos de viabilidad?
-Nuestros centros se centran en diversos aspectos relacionados con la sostenibilidad. Primero, hemos asumido compromisos para mejorar la salud de las personas con quienes trabajan, reconociendo su importancia para nuestros productores y el medio ambiente en general. Además, hemos introducido cambios significativos en nuestros jarrones, como la introducción de botellas totalmente reciclables, incluida una tecnología innovadora para eliminar la válvula de silicona de nuestros grifos y la exploración de opciones de materiales alternativos para reducir el impacto de los jarrones en el entorno que nos rodea. Nos hemos fijado el objetivo de alcanzar cero emisiones netas en toda nuestra cadena de valor para 2050 y reducirlas para 2030, reflejando nuestra responsabilidad en la lucha contra el cambio climático.
-¿Cultivarías tomates que tuvieran tomates en ketchup español?
-España es precisamente el rincón del ketchup, las condiciones son perfectas para cultivar nuestro tomate maduro molido, y la zona de Badajoz todavía tiene superficie de cultivo. La familia Vázquez, propietaria de Conesa, lleva más de tres generaciones cultivando tomate con nosotros. Nos esforzamos por mejorar las técnicas de cultivo y la calidad de los cultivos, y también las implementamos de manera óptima para mantener las condiciones óptimas para el cultivo de tomates de alta calidad.
-En España, la agricultura está sufriendo la sequía. ¿Cuáles son tus aviones?
-Hemos ha estado trabajando activamente para implementar prácticas de restauración de suelos, como la rotación y los cultivos de cobertura. Como resultado, hemos aumentado significativamente la capa superficial de azúcar y la cantidad de tomates en los campos de la familia Vázquez. Estos resultados arrojaron resultados notables, mejorando la materia biológica del azúcar y aumentando significativamente el rendimiento del tomate. En principio sólo tenemos la impresión de que se trata de prácticas en cuatro campos, pero hoy en día el 100% de las explotaciones que producen tomate Heinz en España aplican a cultivares de cobertura.
-¿Qué pasa con la estructura hidráulica de su empresa? ¿Cómo reducir?
-En cuanto a la envolvente hidráulica de Heinz, este es un aspecto clave de nuestro estudio de viabilidad y hemos tomado medidas concretas para reducirlo. Nuestros objetivos incluyen una reducción del 20 % en la intensidad del uso del agua en cuencas de alto caudal y una reducción del 15 % en nuestras instalaciones de fabricación. Estos objetivos reflejan nuestro compromiso con la gestión sostenible de los recursos naturales, incluida el agua, y nos muestran nuestro interés en reducir nuestro medio ambiente medio en todas las fases de nuestra cadena de valor.
-En su agenda de hitos ESG afirma que en 2022 creará una botella completamente circular de ketchup de tomate Heinz. ¿Qué porcentaje de sus contenedores son circulares?
-El objetivo a gran escala es que en 2025 nuestros sobres sean 100% reciclables, reutilizables o compostables. Además, nuestro objetivo es que al menos el 30% de los materiales utilizados sean reciclados. Pero eso no es todo: con Pulpex, hemos probado opciones de materiales alternativos como parte de los esfuerzos en curso para lograr nuestro compromiso más reciente de reducir el plástico virgen basado en combustibles fósiles al 30% para 2030.
-¿Cuándo se retirará el plástico de su transacción?
-En Heinz hemos hecho compromisos para mejorar la envoltura ambiental de nuestros jarrones, incluida la circularidad, la envoltura de carbono y la eliminación. Lanzamos un compromiso de reducción absoluta del plástico virgen del 30% para 2030, diseñado para reducir nuestra dependencia de los plásticos basados en combustibles fósiles.
-¿Qué materiales se utilizan para sustituirlos?
-Una de las asociaciones clave que estableció el año pasado con Pulpex, una empresa innovadora en embalajes de papel. Con tu colaboración estamos desarrollando una botella de papel que es, sin duda, un gran paso en nuestro trabajo por reducir el uso de plástico en nuestros jarrones. Está elaborado 100% con pulpa de madera de origen sostenible, lo que garantiza que el proceso de fabricación provenga de fuentes renovables. También es renovable y reciclable, lo que reduce significativamente su impacto medioambiental.
-¿Qué pasa con los antojos alimentarios derivados de su negocio? ¿Dónde se trasladan? ¿Qué está pasando con ellos?
-La mejor parte es que originalmente comenzó como una solución a la necesidad de alimento, ya que tomó tomates demasidados o poco maduros y les dio forma para crear el producto que ahora conocemos y amamos. Desde entonces, Heinz ha optimizado los tomates utilizados para hacer ketchup y otros productos derivados del tomate para eliminar el desperdicio de alimentos en los cereales. Nuestra fábrica de Elst (Países Bajos) obtuvo recientemente la certificación verti-cero, porque se recicla, reutiliza o valoriza la mínima cantidad de residuo generado.
-¿Por qué, por qué pensaste en mejorar la durabilidad de Fortnite?
-Esta idea surge de nuestro deseo de educar y conectar con una audiencia más amplia y diversa, particularmente la generación de 18 a 34 años. Reconocemos que, en el mundo cada vez más digital de hoy, los videojuegos son una plataforma poderosa para hacerlos públicos. Nuestra misión era educar al público sobre el estado actual de la salud solar y promover un cambio ambiental positivo. Como estamos asociados con Fortnite, podemos transmitir un mensaje serio de una manera que resuene entre los jugadores y genere conciencia sobre la importancia de nuestros futuros jugadores. Es una forma innovadora de conectar con el público más joven.
-¿Cuál es el objetivo? ¿Qué acogida ha tenido?
-El propósito de esta iniciativa era doble. En primer lugar debemos ser conscientes y dar a conocer la importancia de mantener nuestra salud. La salud solar es esencial para la producción de alimentos y el bienestar del planeta, y queremos transmitir este mensaje de forma eficaz al público más joven. En segundo lugar, pudimos llevar al mercado un programa de salud del azúcar para que los productores mejoren la calidad y la salud del azúcar. Contamos con medidas rentables para que los agricultores promuevan el uso de prácticas agrícolas regenerativas como parte de nuestro “Programa de Salud del Sol”, que incluye prácticas como cultivos de cobertura, rotación de cultivos y compostaje.